El movimiento Zero Waste o Residuo Cero es una filosofía que busca reducir al máximo el número de residuos que generamos día a día con una serie de reglas muy simples que buscan cambiar los hábitos de nuestras rutinas, optando por alternativas que tengan una vida útil más larga y estén realizadas de materiales más eco-friendly, como la madera, el metal o el vidrio. 

¿Dónde nace la filosofía Zero Waste?

El movimiento zero waste nace en California en los años 70 con  Paul Palmer. 
Hay una frase suya que resume el pensamiento “zero waste” : “No tiene sentido que utilicemos un material tan resistente como el plástico para fabricar envases desechables (ya que tardan millones de años en desaparecer), que consumimos en  unos pocos minutos (como una chocolatina)”.  

En la actualidad, la filosofía Zero Waste cuenta con referentes alrededor del mundo que cuentan con miles de seguidores e intentan concienciar día a día de los pequeños cambios que podemos hacer. 

Uno de las mayores voces de este movimiento es Bea Johnson, madre de familia de California que ofrece conferencias por todo el mundo y defiende las ventajas de simplificar la vida.

Bea Johnson con su familia

Otra es de las grandes influencers del movimiento es Lauren Singer, la creadora del blog Trash is for Tossers en el que ella comparte todo sus trucos en su día a día para reducir los residuos que genera. También tiene una tienda en NYC en la que vende artículos de Zero Waste, Package Free Shop.

Lauren Singer, junto con la basura que ha generado en los últimos 5 años con el Zero Waste

Principios del Zero Waste

Los principios del Zero Waste se basan en los principios de que para disminuir el número de residuos es preciso Rechazar, Reducir, Reusar y Reciclar, es decir, no sólo es necesario separar y reciclar adecuadamente los residuos que generemos sino que aprendamos a rechazar y reducir aquellos productos que sabemos que suponen un gran perjuicio para el medio ambiente y esforzarse por aumentar la vida útil de los productos, disminuyendo la cantidad de residuos de un solo uso.

¿Por qué unirse al movimiento Zero Waste?

Cada día se generan miles de residuos por persona, el movimiento Zero Waste busca  apotar su granito de arena a paliar el terrible problema que supone el volumen de residuos, especialmente plástico, que se genera cada día

Algunos datos a tomar en cuenta:

• Se vierten en el mar 165 millones de toneladas de plástico.
• Se estima que en 2025 habrá 1.1 toneladas de plástico por cada 3 toneladas de peces, es decir, que en 35 años habrá más plástico que peces en el océano.
• La producción de plástico se ha multiplicado por 20 en los últimos 50 años y se triplicará en los próximos 30 años, llegando a 1.124 toneladas.
• El plástico representa más del 12% del total de residuos sólidos urbanos, en comparación con el 1% de 1960.
• El 98% de las cápsulas desechables de café se convierten en residuos no reciclables.
• El 95% del valor material de los embalajes plásticos se pierde después de un sólo uso.
• Si los componentes de los productos que se fabrican se reutilizaran y no acabasen siendo residuos se ahorrarían 625 millones de €
• Si pusiesen en fila todas las botellas de agua que se consumen en EE.UU en una sola semana darían cinco vueltas al planeta.

Pasos básicos para reducir tu basura

Evitar el plástico y otros residuos es difícil hoy en día con el sobre envasado de todos los productos, por ello, te damos unas reglas sencillas para empezar. 

Intenta empezar poco a poco, por ejemplo, cambiando los productos del baño, luego los de la cocina y así y poco a poco verás como va bajando el volumen de plásticos en el cubo de la basura.

  • Analiza tu basura. Fíjate en qué productos usas y qué tipo de envasado tienen e intenta buscar alternativas más respetuosas con el medio ambiente.
  • Compra a granel. Comprar a granel te permite medir medir cuánto productos necesitas y cuánto vas a utilizar, además reduces el uso del plástico porque puedes llevar tus propios recipientes.
  • Rechaza lo innecesario, empieza a decir «no, gracias» cada vez que te ofrezcan una bolsa o pajita de plástico y lleva contigo una bolsa, pajitas de metal o cubiertos propios para poder sacarlos en sitios donde sólo cuenten con desechables.

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