¿Estás iniciándote en la cosmética natural y buscar crear un champú sólido y natural, al estilo Lush?
En este post, revisaremos el proceso paso a paso de cómo crear un champú sólido casero.
¿Cuáles son las ventajas del champú solido?
- Reduces la huella de plástico, entrando en el mundo Zero Waste.
- Conoces los ingredientes y proceso de fabricación de aquello que te cuidara el cabello.
- Puedes elegir el olor, textura y beneficios de tu próximo champú, adaptándolo a tus gustos.
Receta para hacer champú sólido
El champú sólido tiene una composición parecida a la del jabón, es una mezcla compuesta de una solución de sales alcalinas (hidróxido de sodio), agua y aceites.
Ingredientes para hacer champú sólido
- 2/3 de taza de aceite de oliva
- 2/3 de taza de aceite de coco
- 2/3 de taza de aceite de almendra dulce
- 3/4 de taza de agua fría
- 1/4 de taza de hidróxido de sodio al 100%
- 2 cucharadas de aceites esenciales (elige la esencia que más te guste)
¿Qué es el hidróxido de sodio?
El hidróxido de sodio (NaOH), también llamado soda cáustica o lejía, es una sustancia muy versátil que se utiliza en una gran variedad de procesos de fabricación.
El hidróxido de sodio es uno de los ingredientes de base del jabón y champus, ya que, reaccionando junto a los ácidos grasos, da vida al proceso de saponificación.
¿Dónde se puede comprar el hidróxido de sodio?
El hidróxido de sodio o sosa caústica se puede comprar en tiendas de jabones, cosmética natural o en Amazon, es un producto común ya que cada vez más personas están interesadas en crear sus propios jabones y champús sólidos.
Proceso para hacer champú sólido
- Paso 1: Mezcla los tres primeros aceites de la lista de ingredientes en un recipiente grande, que te permita trabajar con facilidad. Si alguno de los aceites con los que trabajas se mantiene en formato sólido, derrítelo, mide la cantidad que necesitas e inclúyelo a la mezcla.
- Paso 2: Mide el agua muy bien e introdúcelo en un recipiente de vidrio o acero inoxidable, comprueba que este recipiente es resistente al calor, ya que la reacción exotérmica con el hidróxido de sodio puede subir la temperatura hasta los 93 °C.
- Paso 3: Mide muy bien la cantidad de hidróxido de sodio, asegurando que no incluyes más que un cuarto de taza. Con una cuchara, revuelve mientras viertes lentamente el hidróxido de sodio en el recipiente con agua. Añade el hidróxido de sodio al agua, EVITA hacerlo al revés.
- Paso 4: Revuelve hasta que la mezcla comience se aclare y evita los humos durante el proceso. Deja luego enfriar hasta aproximadamente 50 °C.
- Paso 5: Calienta la mezcla de aceite hasta los 23 °C y vierte de manera lenta la mezcla de hidróxido de sodio y agua en los aceites.
- Paso 6: Durante los próximos 5 minutos, no dejes de mezclar de forma manual, permitiendo que el mayor número de moléculas de aceite entren en contacto con la mayor cantidad de hidróxido de sodio . Tras los 5 minutos, usa una batidora de mano para seguir con la mezcla, evitando introducir aire. Sigue mezclando hasta que el compuesto se espese.
- Paso 7: cuando hayas conseguido una mezcla espesa, agrega una cucharada extra de aceite, esto agregará humedad adicional a tu champú casero. También, en este punto puede añadir los aceites esenciales a tu gusto. Recuerda revolver bien para que se mezclen todos los ingredientes de forma adecuada.
- Paso 8: Vierte la mezcla de jabón en moldes con la forma que quieres que tenga tu champú y cúbrelos con plástico. Tras 24 horas, colócalos en un papel de pergamino o una rejilla para hornear. Mantenlos en un lugar seco y gíralos una vez a la semana aproximadamente. Tras un periodo mínimo de 4 semanas, ya podrás usar tu nuevo champú casero y este será más suaves cuanto más tiempo haya reposado.
¡Y eso es todo! ¡Disfruta de tu champú sólido casero!